No servía de nada llorar, no servía de nada castigarse, no servía de nada saber que cada día que pasaba se complicaba más. Mi único deseo era poder estudiar. Pero justo aquel día, justamente el día en que llegamos, comenzó la guerra. Nunca olvidaré aquel día. Era oscuro y frío. Al principio solo fueron días en los que nadie salía de casa, pero se convirtieron en meses y esos meses en los que todos estábamos aterrorizados pasaron a ser años. El primer año fue de temor y todos estábamos asustados; el segundo año la gente todavía tenía miedo, pero pasados tres años la gente no sabía qué hacer, era desesperante la situación en la que nos encontrábamos. Siguieron pasando los años y la guerra no se acababa. Pero no me iba a quedar de brazos cruzados, yo quería ser como aquellas chicas que habían llegado a ser tan famosas por sus estudios, y era un reto que habría de conseguir. Y no me rendiría hasta cumplirlo.
La guerra civil cada vez va a peor y causa mas problemas. Tras los bombardeos del pasado viernes han resultado muchas personas heridas y muertas.
En la foto podemos observar tres niñas cuidando de sus hermanos pequeños, huérfanos de la guerra. A pesar de estar muy oculto entre las montañas, este pequeño pueblo de la zona de Cangas del Narcea no se ha podido librar de los bombardeos. Han causado un total de diez muertos y veinte heridos. Los heridos han sido trasladados a un campo de refugiados. Este tipo de campos cada vez están mas llenos de gente que se ha quedado sin hogar y heridos por los bombardeos. La Cruz roja está haciendo una importante y honorable labor salvando muchas vidas durante esta guerra.
Buscando en la chaqueta de mi hermana, he encontrado esta fotografía. Lo que daría por volver a ese día… Era por la mañana e íbamos a la escuela. Yo soy la niña pequeña que está en el cuello de Graciela, mi hermana, la niña de en medio, y las otras tres eran nuestras vecinas… Ahora estoy sola y es de noche, está frío y oscuro, no puedo parar de llorar. Esta tarde ha habido un bombardeo y una de las bombas ha caído en el colegio. Mi hermana, mis amigos, mi profesora… todos están muertos. He tenido la suerte de haber llegado tarde a la escuela… bueno, sinceramente no ha sido una suerte. Hubiese preferido morir, junto con las personas que quería, ¿qué voy a hacer yo ahora? Ya no tengo razón por la que vivir y mucho menos, ganas. He sufrido tanto en mi corta vida viendo morir a las personas que más quería, que no soy capaz de seguir adelante…
En pie de guerra
No servía de nada llorar, no servía de nada castigarse, no servía de nada saber que cada día que pasaba se complicaba más. Mi único deseo era poder estudiar. Pero justo aquel día, justamente el día en que llegamos, comenzó la guerra. Nunca olvidaré aquel día. Era oscuro y frío. Al principio solo fueron días en los que nadie salía de casa, pero se convirtieron en meses y esos meses en los que todos estábamos aterrorizados pasaron a ser años. El primer año fue de temor y todos estábamos asustados; el segundo año la gente todavía tenía miedo, pero pasados tres años la gente no sabía qué hacer, era desesperante la situación en la que nos encontrábamos. Siguieron pasando los años y la guerra no se acababa. Pero no me iba a quedar de brazos cruzados, yo quería ser como aquellas chicas que habían llegado a ser tan famosas por sus estudios, y era un reto que habría de conseguir. Y no me rendiría hasta cumplirlo.
Laura Mínguez 1º ESO B
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La guerra deja efectos catastróficos.
La guerra civil cada vez va a peor y causa mas problemas. Tras los bombardeos del pasado viernes han resultado muchas personas heridas y muertas.
En la foto podemos observar tres niñas cuidando de sus hermanos pequeños, huérfanos de la guerra. A pesar de estar muy oculto entre las montañas, este pequeño pueblo de la zona de Cangas del Narcea no se ha podido librar de los bombardeos. Han causado un total de diez muertos y veinte heridos. Los heridos han sido trasladados a un campo de refugiados. Este tipo de campos cada vez están mas llenos de gente que se ha quedado sin hogar y heridos por los bombardeos. La Cruz roja está haciendo una importante y honorable labor salvando muchas vidas durante esta guerra.
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Buscando en la chaqueta de mi hermana, he encontrado esta fotografía. Lo que daría por volver a ese día… Era por la mañana e íbamos a la escuela. Yo soy la niña pequeña que está en el cuello de Graciela, mi hermana, la niña de en medio, y las otras tres eran nuestras vecinas… Ahora estoy sola y es de noche, está frío y oscuro, no puedo parar de llorar. Esta tarde ha habido un bombardeo y una de las bombas ha caído en el colegio. Mi hermana, mis amigos, mi profesora… todos están muertos. He tenido la suerte de haber llegado tarde a la escuela… bueno, sinceramente no ha sido una suerte. Hubiese preferido morir, junto con las personas que quería, ¿qué voy a hacer yo ahora? Ya no tengo razón por la que vivir y mucho menos, ganas. He sufrido tanto en mi corta vida viendo morir a las personas que más quería, que no soy capaz de seguir adelante…
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